
CON MIMO
Con mimo, con inmensa
dulzura, te acercaste al umbral
de mi casa, y la llenaste
de paz.
Tú siempre eres así;
llegas en el momento oportuno,
para compartir un poco de vino
y de pan.
Yo tendré siempre para ti
mi puerta abierta...
por si quieres reposar.
Con mimo, con inmensa
dulzura, te acercaste al umbral
de mi casa...
¡No te marches jamás!
Pilar Baixeras