I
Hoy mis letras son frías,
hielo que quema entre mis dedos,
vacío hueco repleto de aire helado,
corazón roto aguijoneado
por un iceberg hiriente.
Hoy mis sentimientos son áridos,
tierra sudada en un desierto
sin oasis ni palmeras para aferrarse,
corazón cercenado
por un cactus vengativo.
Hoy mi martirio se hunde
en un duelo de amargo
sabor a Nada.
Hoy es el gran día del desamor,
de las hojas caídas,
de la lluvia en el asfalto,
de las luces que se apagan,
del desgarro en el corazón abandonado.
II
Este llanto amargo
me muerde las entrañas,
me picotea el corazón
y me postra en la desgracia.
Este llanto amargo
retuerce mis venas,
envenena mi alma
y humilla mi consciencia.
Este llanto amargo
me lo voy callando en solitario,
paladeando su angustia,
sometiéndome a su existencia.
Este llanto amargo
va abriendo surcos
de odios y desesperanzas.
Este llanto amargo