NO CORTES FLORES
Tú lo sabes bien mi amor
que los bullicios, los ruidos
contaminan mi mente
porque tú eres la caricia de mis silencios.
Quisiera no dormir
Temo que en esas horas no estés en mi mente
Cuánta gratitud te tengo por este amor que me inspiras
Tú y yo siempre estaremos juntos en las madrugadas.
En la huida del día en el confín de los tiempos
Qué importa esta despedida si ya eres parte del alma mía
de mis sueños tú eres la película
el portador de mis deseos y dichas.
Me disfrazas de alegría
y de bellas venturas me desnudas
Atrapemos un cometa.
Volvamos a ser niños
en una larga primavera.
Sólo te pido una cosa
no me regales flores
no cortes una vida
déjalas que se embriaguen con el perfume de las noches
que vayan envejeciendo sintiéndose vivas.
Que sirvan de alimento a los pájaros
Que con sus picos las depositen
en una tierra nueva
y que sean otra vida.
No, no me regales flores, no cortes una vida
déjalas que lentamente se despidan
del lugar donde están tan unidas.
Así como tú iré dejando algún día
las noches, las albas, las brisas
sólo para que nuestras almas sigan unidas
allí en un mundo de inmensa vida.
Adelaida Díaz Gálvez