PRISIONERO
A esta hora en la madrugada
te he llamado con el pensamiento.
He pensado en tus gestos,
en tu mirada y en tu voz.
Amor...ya es tarde
para alcanzar tu vuelo,
ya las golondrinas se fueron
para vivir emociones nuevas.
Tú eres una de ellas,
vienes y te vas cuando quieres.
La palabra libertad me causa miedo,
tal vez tus besos
ya me hicieron prisionero.
Y volverás a ser mi sombra,
la veleta que gira y gira,
el velero que naufraga
y nunca llega a su orilla.
He pensado en tu sonrisa
que cautiva todos los mares.
Mi corazón está perdido
entre tu desdén y tu cielo.
Amor...te he llamado
con inquietos deseos.
Pero ya es demasiado tarde.
Demasiado tarde...
A esta hora en la madrugada
te he llamado con el pensamiento.
He pensado en tus gestos,
en tu mirada y en tu voz.
Amor...ya es tarde
para alcanzar tu vuelo,
ya las golondrinas se fueron
para vivir emociones nuevas.
Tú eres una de ellas,
vienes y te vas cuando quieres.
La palabra libertad me causa miedo,
tal vez tus besos
ya me hicieron prisionero.
Y volverás a ser mi sombra,
la veleta que gira y gira,
el velero que naufraga
y nunca llega a su orilla.
He pensado en tu sonrisa
que cautiva todos los mares.
Mi corazón está perdido
entre tu desdén y tu cielo.
Amor...te he llamado
con inquietos deseos.
Pero ya es demasiado tarde.
Demasiado tarde...
Ramón Álvarez
Melilla, 30-1-1999