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| Gaspar González Pina |
Palabras de Gaspar González Pina tras la entrega de
la Medalla de San Isidoro a Juan A. Pellicer
Es evidente que cuántos
nos hallamos en esta sala hemos llegado hasta aquí con un solo propósito, un fin
muy especial, arropar con nuestra presencia a un hombre que si no héroe, sí
luchador incansable. Hemos llegado hasta aquí para mostrarle nuestro
reconocimiento, nuestro cariño, nuestro apoyo. A ser testigos de ese premio tan merecido y
distinguido como lo es la Medalla de San Isidoro de Sevilla, la más alta
distinción que otorga nuestra organización de escritores.
Juan Antonio Pellicer
bien se merece este galardón, que estoy seguro ha de llenarle de felicidad e
ilusión para seguir luchando en el campo de batalla de las Letras. Y, digo en
el campo de batalla, porque escribir no es fácil si nuestra mente y corazón no
se conjuntan, si la verdad, el buen juicio y los buenos sentimientos no se
abrazan entre sí y forman esa pluma que nos marca el día a día. En un campo de
batalla no sólo se gana con una espada. A veces, también se gana con una pluma
y la honestidad de los hombres.
Enhorabuena, Juan
Antonio. Dios te bendiga.