Poema de Celia Cortés
Murió
el sol esta mañana sin darse cuenta.
Murió
el viento, fue más tarde.
Murió
el trino de aves ya muertas.
Han
muerto el agua, las nubes, la hierba,
murió
el brillo dulce del mirar que se anhela.
Ha
muerto la voz, las manos, la cabeza,
murió
el honor, que nadie recuerda.
El
corazón ni siquiera estaba en su sitio,
era
una caja vacía, que creía que era,
era
sólo un sonido, un rugir,
una
ráfaga de viento, una mierda.
Han
muerto las estrellas, la luna,
los
deseos, los sueños, murió la palabra,
murió
el sentir, murieron los ojos, el tiempo.
Murió
la esperanza, el espacio,
murió
la agonía, la mentira, el caos.
Murió
la sonrisa, murieron los besos,
murió
mi silencio, murió mi quimera.
(Poema
inédito)