Poema de Paco Veira
las olas con voz arenosa
clamaban tu nombre.
La blanca espuma del mar bañaba tus pies…
con su agua azulina, tibia
y calmada,
la silueta de tu cuerpo
reflejada en el agua,
se cubría con los rayos
del sol.
Tu mirada dirigida al infinito
se pierde en el
pensamiento
recordando tu vida
aventurera, otros lugares,
sitios y momentos
gratos vividos,
Percibía tu gozo y felicidad,
en ese momento, envidia
tuve de ti…
y celos de tus
pensamientos.
¡Qué daría yo por ser
parte de ellos!
ser partícipe de tus
sueños
y objetivo de tus
pensamientos.
Pero, mi alegría duró solo
un momento.
el sol huía, las sombras te
borraban,
te alejabas de mi vista,
tu cuerpo se hacía
pequeño,
tus huellas, despacio el
mar las borraba,
Se desvanecía mi esperanza
e ilusión,
no se si volveré a verte
pasear,
no se si volverás a
alegrar mi corazón,
pero volveré, no desistiré
del intento.
No quiero pensar que fue
simplemente un sueño.