Poema de Carmen Hernández Rey
Un cuerpo autócrata
departiendo con mi
corazón...
Cual leitmotiv departe y
delibera
ahogando mi voz
en su canícula
autocrática;
amor cadáver que rechaza
morir, y ser enterrado
fuera de él.
Reencarno odas en mi
delirio,
in extremis doy la
absolución
y la unción reconciliadora
pongo en su pecho
el viático para -el buen-
viaje
de rodillas me postro
rezando
la anáfora
sacrificial y de acción de
gracias.
Pero no...
Es amor...
Un amor eterno...
Un amor con vida propia
e insurrecto...
que dice tener, venia
y me enuncia un sin fin de
lavándulas
para purificar su carne
y no morir dentro
-de mi corazón-
Tengo... tengo... tengo
Un amor cadáver,
y no sé qué hacer con él.