Tus manos bordan sentimientos
Tus manos bordan sentimientos
Que llegan a los corazones
Cual mixturas sabrosas
Y milagrosas.
Modelas el acero con soltura
Y los vas engarzando con dulzura
Haciendo que sus formas te hablen
De inspiraciones divinas.
Soñador de lo imposible
En los cauces del dolor
Que a veces, haces posible
Con las flechas del amor.
Eres cual Rey coronado
Por la gracia de Dios
Repartiendo los dones
Que Él te dio.
Y también eres mendigo
Implorando compasión
De aquellos que hacen la guerra
Y nunca piden perdón.
Caminas por tus calles
A veces sin salidas
Prefiriendo el vil encierro
Que sin libertad andar por tu vía.
Eres el rayo y el trueno
La luz y la oscuridad
El acíbar y la miel
Cuando enamorado estás.
Viajero impenitente
Sin mochila ni equipaje
Descalzo te adentra por la selva
Sin importarte las fieras al acecho
Que te espían.
Eres el mago que tiene en sus manos
La varita mágica para el hambriento
Que no tiene ni el pan en su mesa
Como alimento.
Bohemio y encantador,
Vas con la lira y tus versos
De puerta en puerta
Unas veces cerradas
Y otras, abiertas.
Guitarra y lamento se aúnan
En tus fronteras abiertas
Para el que quiera encontrar la Paz
Y el amor en tus letras.
Con tus sentimientos profundos
Imposibles de igualar
Vas en busca de esos sueños
Que no lograste encontrar.
¿Qué te digo Hidalgo Caballero?
¡Si mi pluma no te alcanza!
Y mis musas se fugaron
A tu lado, en tu labranza.
Pues te diré…
Que no hagas de la muerte
El mejor de tus poemas.
Hazlo de tu vida entera…
Y de la alegría que hoy sientes
Al ser galardonado por la UNE
Con la medalla de
San Isidoro de Sevilla.