El Arte de la
Metamorfosis, dos autores: Ella una escritora alemana, Sylvia Fabiola. Él, un
pintor Octavio Ocampo, mexicano.
En verdad que me ha
impresionado, un libro muy cuidado, elegante, limpio, una editorial fantástica,
en el he descubierto unas pinturas excelentes. Surrealismo llevado a cabo con
una mente clara.
A veces vemos trabajos
y pensamos, ¡cuánto le ha costado al pintor o pintora mover el pincel para
terminar esta obra! En cambio, al mirar cada una de las expuestas en este libro
podemos darnos cuenta de que el maestro ha trabajado sabiendo en todo momento
mover el pincel, sin duda, muy a gusto.
Cada uno de estos
cuadros los adopta una escritora extraordinaria para: un poema, o un relato.
Unas letras bellísimas que sirven de marco y engrandece la obra. O, ¿quizá las
letras le sirven al maestro pintor para llevar a cabo su trabajo?
La una y la otra, tal
para cual, cuadro y letras, han sabido colaborar sin importar que un océano les
separaba. Cada uno en su sitio. Abrazándose fuertemente.
Podemos ver mariposas revoloteando que en un momento
saben ponerse en su lugar y nos dejan ver una cara dulce. O, un pequeño can de
pelo largo que, al sacudirse, su pelo sale una niña transformada en una flor:
de un árbol, de unos lirios, de dos caras un cáliz… mientras miro me parece
estar en un sueño, ¿soñando? Sigo mirando…
Todos esos sueños, esos bordados, surgen las letras
para dar cobijo a tanta armonía, colores que envuelve todo, pinceladas
acariciando el lienzo, la tela puesta en el bastidor para la eternidad envuelto
en: poemas, relatos, más pinceladas, más colores, convertidos en letras, ¿qué
son en la literatura cada frase, cada silaba?, colores, pinceladas…
Poco puedo decir más, mejor sigo leyendo,
envolviéndonos en las “hojas” páginas de este libro que si me fijo bien son
todo mensajes, reflexiones, porque, a fin de cuentas, ¿qué es el arte?, ¿qué es
un poema? ¡Es poder escuchar el alma del autor!