Francisco Luque Bonilla, poemas

La paz como una estrella

La paz, un saludo de calma

en el eco de la batalla diaria.

La paz tan necesaria como la respiración,

como la vida y la humana existencia

duradera como un diamante.

Una completa y eterna paz,

Inalterable, solidaria.

Paz en la tierra, desarmada de guerras.

La paz coronada por ojos brillantes,

sonrisas plenas.

La paz con su propio aliento de sangre

la salva de la muerte imposible.

Paz a la tristeza de las almas de los muertos.

Paz para una esperanza incalculable

siempre llamada y doblegada.

La paz, luz de los días valientes, deseada.

Hermosa, con la grandeza de los años.

Una paz como una rosa inviolable.

Nuestro objetivo, paz con justicia, fecunda

puesta en pié, honrosa, para todas las naciones.

Una paz que alumbre las calles

de ese dolor de las hordas salvajes.

Paz al odio de los vientos irracionales

con sus sombras que respiran violencia.

Crea y ten una paz como una estrella

para que escuchen al mundo su desesperación.

La paz tiene que ser el destino de la gente.


Granada

Granada, tierra de ensueño,

dejaste en mi alma tu huella.

Cuna de arte y de historia,

eres un tesoro en la tierra.


La Alhambra, joya eterna,

es un regalo de los dioses.

Sus jardines y sus patios,

son poesía en sus rocas.


El Generalife, oasis de paz,

con su fuente y su verdor.

Es un paraíso terrenal,

un lugar lleno de amor.


El flamenco retumba en el Sacromonte.

La catedral y la Capilla Real,

muestran la grandeza de tu fe.

Allí reposan tus reyes.

El Albaicín, laberinto morisco,

es un barrio lleno de vida.

Sus calles son de leyenda,

sus vistas son una caricia.


La Sierra Nevada

se yergue majestuosa

al fondo del paisaje que inspira,

el río Darro fluye con su melosa voz.


Granada, mi amada ciudad,

eres una perla en la historia.

Tu belleza y tu magia,

son un canto a la gloria.


Poética
¡Qué arte, hacer a las palabras danzar!
que requiere de ritmo y de armonía,
de saber combinar con maestría
la belleza del poema, al crear.
 
No basta con juntarlas al azar,
conseguir una métrica vacía,
hay que descubrir la voz que las guía
la sensación que las hace vibrar.
 
Cuando expresan con gracia y con espuma
el pensamiento, el sueño y la ternura.
cuando bailan al ritmo de la pluma,
 
Nunca son simples signos sin figura,
sonidos que se pierden en la bruma,

de la lengua, la ciencia, y la escritura.


El laberinto de la nada

Se ha extendido su colorido

en la espesura insuperable

del abismo del sol.

Ese persistente espacio de seducción

ese zumbido que brilla en el pecho.

 

Y el mundo le puso su luz

y ella  lo transformó.                                        

Vivirá de su policromía.

Una sabia expresión parece

un sagrado movimiento,

otra corriente de la fantasía

revoltoso y extraño

al borde de la inquietud de su espejo.

 

Un sinfín de tonalidades

aglutinadas en varias medidas,

elementos colocados

de diferente manera,

para adaptar un esbozo llamativo.

 

Su pasión rompe lo profundo del destino.

Se  desvanece

en la hora sumergida del tiempo.

Vivir un tiempo, solemne y sublime.

 

Esta matemática transparencia

de la desconocida respiración

una figura con un espacio de luz.

Un  dios ilumina al artista

los días se van con el viento.

 

El sentimiento, la claridad,

inseparables del mundo late.

Establece al sol y las estrellas alegres.

Una impresión visual

de matices vivos y fuertes

parece que ha subido del cuerpo

ese color encendido de dulce arrebol.

La llama del silencio

estaba floreciendo en el aire.

Este esbozo de ondas tenues

no es la visión de un solo día

es la mirada toda la vida.


8 de Marzo

El mundo es hombre, es mujer

cada uno de ellos es la mitad de la tierra.

A los ojos  del mundo,

es invisible la mujer.


Es invisible la mujer

desde el principio

desde el origen de la humanidad.

Una y otra vez le han obligado

como un diamante de papel

lo que puede ser y lo que no,

cómo debe sentir, aunque no quiera.

 

Es invisible la mujer

porque tiene la esperanza

un tejado de cristal.

También se rebela

le da la vuelta a la historia.

 

Es invisible la mujer,

a muchas de ellas, luminosas,

carne de estrella, universo

les apagaron la vida.

 

Tiene que estar presente la mujer

en un mundo mejor

con justicia, viva, libre

unida por la igualdad.


Primavera 2020

Esta primavera apareció la muerte

como una bestia hambrienta de almas.

La vida a través

de los concurridos ventanales.

El silencio brilla

en las ciudades desiertas

las calles reposan solitarias al sol.

 

El virus a nuestro alrededor

todo lo ensombrecía.

Cualquier aliento,

con los mismos síntomas

lleva el miedo en el rostro.

Una vida larga o corta

en un momento,

arrancada del pecho.

 

La inquietud transcurre

a lo largo de los días.

La supervivencia se convirtió

en los hospitales

en una urgente necesidad.

¿Qué clase de milagro

hay que realizar en la tierra

para salvar a todas las gentes?

La pasión de los sanitarios

su vocación asombrosa

nunca son suficientes.

 

El dolor era más extenso que un atlas.

Hasta las lágrimas han volado, huyeron 

de las fuentes del corazón.

Las horas ennegrecidas de la vida

presentes en la memoria.

La tristeza de la existencia

han hecho de escarcha los besos.

La vida, con el tiempo

se irá soltando poco a poco

de los temores,

del espanto de la muerte.


Amor para vivir

El amor es un clavel

en el abismo del sentimiento

nace en un suspiro

y muere en una lágrima

inevitable.

Amor que se escapa como agua.

 

Amor, para sentirte más,

tenerte más,

como la espina tiene al dolor

tus besos de rosas.

Para detener el tiempo

tenerte siempre

para saber que estoy vivo.

 

Amor sin medida, sin límite.

Amor que nunca tuve

ciego y con alas.

Amor que hierve,

como la sangre de los volcanes.

como una montaña rusa.

 

Amor,  piel con piel.

Amor perdido, perdido amor

construyes el universo,

te alimentas de dolor, de gozo.

 

Amor que quitas penas

te llevo tatuado

Amor traicionero, amor oscuro.

Envenenado.

Amor de buenos días

de buenas noches,  renaciendo.

 

Amor de película,

historia de amor

amor por descifrar,

amor  breve, último.

Eterno mientras dura.


La piel

Es la historia de una piel.

La piel de un amor

que toma su ración de sol, de aire,

para mantener su existencia viva.

En el atardecer.

 

Una piel gloriosa,

en toda la geografía de su ser

que vence la soledad.

Su presencia huella de una sonrisa.

 

Una piel, mezcla de gozo y tristeza, 

de una vida encendida,

agitando los días

en el corazón de la memoria.

 

Una piel, como un susurro femenino

que envenena un recuerdo a la deriva, 

un misterio apasionante.

 

Una piel, dulce mentira

el secreto más secreto

de un tiempo de asombro.

Sentirla el mágico momento.

Vivir el sueño de la piel

y guardarlo para siempre.


Pregunto

Ahora

que la miel del corazón está en calma,

y la dulzura del  atardecer 

camina como perdida.

 

Pregunto ¿por cuánto tiempo?

El viento brilla como la plata

y se aleja ondulante

como un río diciendo adiós.

 

Pregunto ¿por cuánto tiempo?

La huella de la distancia

callejea como un  equilibrista

por  un puente con ojos,

azul de París.

 

Pregunto ¿por cuánto tiempo?

La orilla de la mañana

vuela entre hojas, sombra tibia

que vuelve rojizo al silencio

desorientado

por el rosado clavel de los vientos

 

Pregunto ¿por cuánto tiempo?

La nieve de los labios

lleva la estrella que amanece

entre sábanas de lluvia,

y se despierta

como si hubiera nacido.

 

Un triste adiós

Hoy será el primer día del resto de su vida,

de su corazón frágil,  un nuevo sueño brota.

Hay que seguir, empezar de nuevo, aunque esté rota,

hoy le dice adiós, con una  triste despedida.


Superados todos los miedos, no está vencida,

su desmedido coraje, venció a la derrota.

Beberá su libertad hasta la última gota.

No volverá con él, es tan profunda la herida

 

Quiere vivir en paz, sólo vivir sin dolor.

Adiós  al mudo sufrir. No la supo querer

Pero hoy todo cambia, todo cambia alrededor.

 

Cruzó el mar de la esperanza, volvió a renacer,

es libre y en sus alas el viento a su favor.

Adiós a su pesadilla, empieza amanecer.



Era un 18 de agosto

Era un 18 de agosto,

era un verano de sangre.

Era la España, de las dos Españas,

una matanza entre hermanos, eso era.

Era la sinrazón caminando,

era la injusticia que va enloquecida.

Era un huracán de odio

arrasando seres humanos.

 

Una  herida de muerte recorre  Granada.

Está la sangre  amaneciendo en la tierra.

Un negro quejido se oye entre sombras,

una muerte profunda en los cuatro costados.

Han matado a Federico, al poeta.

 

La sangre amanece en Granada.

El  silencio de una  muerte anunciada

el grito de los fusiles,

un silencio de anónimas fosas.

todo está muy quieto.

Han matado a Federico, al poeta

 

Esa madrugada la luz era hierro

no soplaba una brisa y los cipreses de sal

estaban inmóviles, testigo silenciosos.

Aguardando la salida del sol.

Pero el sol ya no se levanta.


Poema dedicado a Federico García Lorca.

Francisco Luque Bonilla es miembro de la Unión Nacional de Escritores de España.