Un viaje por el río

Relato de Ramón Luque

El día que mi abuela tiró su bastón a la lumbre, que chisporroteaba calentando el que había sido, hasta entonces, su querido hogar, sentí que el mundo, el suyo y el mío, se acababa. Seguidamente, se levantó de su sillón de anea, tan gastado por el uso como ella, y, con paso renqueante, abandonó la cocina, el único lugar que habitaba desde hacía años. Sin mediar palabra salió a la calle. Al principio, temblaba por la falta de costumbre. Después avanzó, firme y decidida, como si fuese una adolescente. Dicen que anduvo, sin atender a súplicas ni consejos, hasta llegar al río. Se subió a la mejor barca y pidió que la llevasen a conocer el mar. Nunca he vuelto a verla. Me han asegurado que lo consiguió. Allí sigue viviendo, entre espuma blanca y rizada como un encaje y salmos de luz.

Ramón Luque está galardonado con el escudo de oro de la Unión Nacional de Escritores de España.